Solo Para algunos colombianos de acuerdo con una propuesta que fue incluida en el proyecto de ley de la reforma tributaria que se radicó el pasado 8 de agosto ante el Congreso.
El gravamen a los movimientos financieros (GMF), nació para hacerle frente a la crisis bancaria por la que estaba pasando el país en el año 1998 y, en ese entonces, era solo de un 2 x 1.000 además se esperaba que su vigencia fuera solo por un año.
Si se aprueba el artículo 64 de la reforma tributaria, se acaba el 4 x 1.000 para quienes hagan movimientos menores a $13,3 millones al mes según indicó Luis Carlos Reyes, director de Impuestos y Aduanas Nacionales (Dian), “Ya existe una exención para una sola cuenta bancaria marcada. En adelante, los bancos deberán consolidar información entre ellos para que la exención aplique sin necesidad de marcar la cuenta”, dijo.
Es importante aclarar que, aunque las entidades bancarias son las encargadas de recaudar este impuesto, el dinero llega a las arcas de la nación para financiar el Presupuesto General de cada año.
Según la DIAN, con corte a abril de 2022, desde la entrada en vigor del 4 x 1.000 el total de ingresos que ha tenido la Nación por este impuesto son $107,4 billones. Además, destaca que su recaudo bruto ha tenido de manera continua un crecimiento año tras año.
Finalmente este impuesto impacta la inclusión financiera y estimula a los colombianos a realizar transacciones en efectivo, y otras prácticas que no son sanas para la economía, pues lo ideal es que toda transacción sea visible, a fin de que la fiscalización del pago de impuestos pueda ser más eficiente, lo que genera equidad: todos aportando para que el país se desarrolle.
Periodista: Mónica Muñoz